Una vez que la has “preparado” o abierto su empaque, tu comida no debería quedarse más de dos días en el refrigerador, esto lo recomendó el Mtro. Mario Valdez Oseguera, que imparte las materias de Toxicología y Tópicos Ambientales en la Licenciatura en Nutrición Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG).
Según explicó el académico, el tiempo es diferente para cada alimento, pero una vez que la comida está preparada, que abriste un empaque o alteraste su integridad, sobre todo los perecederos como fruta o verdura, se debe tratar que no pasen más de dos días en el refrigerador, ya que empiezan a perder humedad, proteínas, nutrientes en general, por lo que no será beneficioso.
“Si hay necesidad de guardarlo más tiempo, lo recomendable es congelarlo. Los alimentos procesados o con conservadores, pueden alargar su vida útil; en este caso si se compra a granel, este producto puede tener un tiempo de vida de 10 días. Si el alimento viene en un empaque, se recomienda el revisar la fecha de caducidad o quesea resellable”, dijo.
Todo lo anterior, para evitar que los alimentos nos hagan daño en corto o largo plazo o no desecharlos, que es la propuesta de este 16 de octubre, que se celebra el Día Mundial de la Alimentación.
Cada año la celebración maneja temática, en este, trató de la sustentabilidad y no desperdiciar alimentos y la inocuidad juega un papel muy importante en estos temas.
La inocuidad trata de que un alimento no haga daño al consumirlo “cuando decimos que es inocuo, quiere decir que no nos hace daño. Esto es un pilar de la dieta correcta. Si no es inocuo, no aporta beneficios, si es algo que comemos y nos hace daño, nos perjudicará, que no cause enfermedades, no sea toxico”, comentó.
Se refiere a su integridad, que esté en buen estado microbiológico para su consumo, así como físico-químico y con sus nutrientes.
Actualmente, a pesar de que se tiene la posibilidad de alimentar a casi toda la población del planeta, aún se desperdician toneladas de comida al día.
Esto es en parte de los hábitos de consumo de las personas, ya sea en el hogar o como comensales, que sirven en su plato, o compran en el supermercado, cantidades de alimentos que no llegarán a sus bocas, pero sí al bote de la basura.
El Mtro. Valdez Oseguera invitó a tomar conciencia y mejores decisiones de las cantidades de productos alimenticios que compran, que estos sean para consumirse y no para desperdiciarse.
Para consumir alimentos inocuos y evitar su desperdicio, el académico compartió los siguientes consejos:
- Comida empacada: verifica que el empaque no presente ningún daño ni comprometida la integridad del alimento.
- Revisa la fecha de caducidad: A veces se aplaza el consumirlo cuando la fecha de caducidad parece lejana y cuando menos se da cuenta la persona, la fecha ha llegado y debe tirarse.
- Alimentos a granel, “porcionarlos” que es crear pequeñas porciones con base a cuando se consumirá.
- “La carne, por ejemplo, cómprala en partes, divídela en las porciones que consumirás, y las que no vayas a consumir, mándalas al refrigerador”, añadió.
- Sigue las indicaciones que tiene el empaque para conservar el alimento y prevenir que estos pierdan sus cualidades nutrimentales.
- Los alimentos que requieren refrigeración (carne, salchicha entre otros) tómalos hasta el final de tu vista al supermercado para mantenerlas en buen estado.
- Sé consiente en las compras que realizas día a día, sólo consume lo que vas a comer.